Daria superó el cáncer de cuello de útero

Hace unas semanas, la FCF fue contactada por Daria: una mujer checa de 30 años a la que se le diagnosticó cáncer de cuello de útero hace dos años. En su historia personal, puedes leer lo que el diagnóstico le hizo y por qué estableció una donación para la FCF. Nos sentimos inspirados por esta poderosa mujer y agradecidos por la hermosa donación.

"Soy Daria y vivo en Praga, República Checa. Actualmente tengo 30 años y me diagnosticaron cáncer de cuello de útero a los 28 años. Llevo una vida sana: hago deporte, no bebo ni fumo. En la revisión periódica con una prueba de Papanicolaou (cada medio año) a partir de los 24 años todo estaba bien. Hasta la revisión de agosto del 20, donde la citología no era buena. Los médicos tardaron 3 meses en acertar con el diagnóstico de cáncer de cuello de útero. Durante todo ese tiempo no tuve ningún síntoma.

Me operaron en diciembre del 20, seguido de 3 meses de tratamiento. Durante esa fase estaba en modo de supervivencia. Tuve una hemorragia severa 1 mes después del OK con anemia.

La verdadera sorpresa llegó después de 6 meses. Me golpeó psicológicamente, porque llevaba una vida sana y me di cuenta de que esta enfermedad no se elige. Lo transformó todo en mi mente. Como mi actitud hacia la maternidad. Me estaba centrando en mi vida personal y en mi carrera, pero ahora tengo que preguntarme: ¿Para qué función estoy aquí? ¿Seré feliz si no puedo cumplir con la maternidad? ¿Cuáles son mis valores en la vida?

La idea de donar surgió cuando se acercaba mi cumpleaños y celebraba mi primer año después del OK. Busqué en Facebook "Donaciones en Facebook y cáncer de cuello de útero" y apareció vuestra organización. Investigué sobre su organización y sus proyectos y tuve una buena sensación. Así que inicié el evento y en 2 días se donaron 400 euros.

Me sorprendió mucho esta gran cantidad en tan poco tiempo y cuánta gente se relacionó con mi historia personal. No sólo me sorprendieron las donaciones (lo interesante fue que muchos hombres donaron), sino que mi bandeja de entrada de Messenger estalló con mensajes de apoyo y cariño. También otras mujeres compartieron su historia personal y me dijeron que era muy valiente al compartir esta historia. No entiendo por qué, creo que no hay que avergonzarse y que es importante crear conciencia. Incluso en la República Checa, donde la atención sanitaria es buena en general, la gente sigue sin ser plenamente consciente de la enfermedad y tiene miedo de realizar el cribado (frotis de PAP). Me hizo darme cuenta de que en los países subdesarrollados esto es un problema aún mayor y por eso estoy muy contenta de que yo (y las personas que donaron) pudiéramos apoyar el trabajo de la Fundación Cáncer Femenino. "